Ya está en los cines la última peripecia bélica de Hollywood.
Sony nos trae la historia de un tanque americano en la Segunda Guerra Mundial, que aunque fuese un poco chatarra , hizo mucho ruido.
La película tiene muchas cosas positivas. Para empezar la historia que cuenta es llamativa. Además el ver la guerra a través de la inocencia de un chaval, nos hace sumergirnos de lleno en la historia.
Toda la ambientación, fotografía y planos están bastante currados, viendo una película que cuida su estética y que regala planos
bastante preciosistas. Además las batallas y escenas de acción son realmente llamativas e impactantes.
Pero sí hay algo fuerte es su reparto. Desde Brad Pitt que hace un buen papel hasta Logan Lerman, chaval que está emergiendo de forma considerable. Pero el que realmente me ha sorprendido ha sido Shia Labeouf. El tío se marca un papel muy creíble, lleno de rabia y quizás el personaje más enigmático y profundo de la historia.
Pero no todo es genial. La película parece que quería ser algo más de lo que es, mas épica, y no lo consigue. Hubiese sido mejor que se hubiese planteado como algo más pequeño y quizás hubiese funcionado mejor.
Las escenas de acción son geniales, pero cuando entramos en el dramatismo nos hundimos. El prota más joven intenta hacerlo bien, pero su personaje no está bien trazado y es lo que hay. Nunca vemos ese horror de una guerra por mucha chasquería que nos enseñen.
Además creo que le sobra metraje, es larga y aunque tenga un buen ritmo, hay escenas que sobran. Sobre todo el buen nivel con el comienza va menguando según avanza el metraje.
Por lo demás es entretenida, grandes escenas de acción y un reparto sólido para una peli de pasar el rato.
LO MEJOR: El reparto y las batallas.
LO PEOR: Que quiera aspirar a más, largo metraje, y el drama nunca llega. Además la música tan épica no va acorde con un peli que no llega a ese nivel.
NOTA: 5/10
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